Cuando veo tus ojos hermosos
y tus bellas curvas admiro
apreciando tu suave andar
comprendo el error cometido,
me enamoré de un ideal
al que jamás podré alcanzar
porque elevada al rango de diosa
vives ajena en tu pedestal.
Siendo como son
espejos del alma,
sin una mirada humana
tus ojos no valen nada
y tu hermoso cuerpo
al que todos admiran
sin comprensión ni valores
sólo es cáscara vacía.
Aún no es tarde si comprendes
y lo que digo te llega,
la felicidad no es externa
y no se puede comprar.
Y cuando encuentres al fin
a quien puedas amar
verás que el secreto se halla
en lo mejor de ti dar.
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