Fui lo que siempre quisiste
pero vos te olvidaste
preferiste lo seguro
a nuestro épico romance
Vos eras la princesa
y yo el mísero plebeyo
que por conquistar tu corazón
se convirtió en caballero
Debí enfrentar demonios
monstruos y fantasmas
arriesgando la vida
con tan solo mi espada
Pero mientras tanto
“la nobleza” acosaba
y por unas migajas
con “los reales” te acostabas
Sombra de lo que fuste
cuando regresé sólo eras
con tus aires de princesa
sólo prostituta encubierta
Yo pagué con mi vida,
mi juventud y nobleza
y vos te vendiste tan sólo
por miserables monedas
No hay comentarios:
Publicar un comentario