En la retina de mis ojos
quedó grabada tu estampa
cuando pasaste a mi lado
con tu belleza perfecta
que me dejó demudado
Tú sólo pasaste
sin siquiera mirarme
impregnando la calle
con tu perfume importado
Y no pude hacer nada
que te detenga un instante
pues cuando al fin me animé
resultó ser muy tarde
Y seguiste de largo
sin notar mi presencia
mientras yo solo quedé
como un regio tarado
No hay comentarios:
Publicar un comentario